Este oficio nómade que me empezó a caminar un día
anda necesitando un claro fresco apaciguado de descanso
un techo de cuentos para ir a dormir
sábanas enredadas con hastamañanas
un pedacito de futuro en la cocina
para un mate que dé ganas de despertar

de amanecer y no ir a ningún lugar
quedarme viendo pasar las luces del día

o quedarnos

amanecernos
dormirnos
contarnos

mañanarnos

que el futuro nunca falte
y tenga código postal al que llegar

que cuando toque a la puerta
la pava ya esté puesta

que el agua no se acabe
paquel presente no termine evaporándose

exprimidores por toda la casa
y escalones para bailar con vértigo

paredes que puedan vibrar
con la voz de todo lo que alberguen

ventanas puertas, lo obvio
pero también rendijas filtraciones agujeritos

una casa abrazo
una zona de descanso